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• Pasos
• Consejos

El ajedrez es un gran juego de mesa y puede enseñar a cualquier niño a examinar situaciones de manera estratégica y analítica. Empiece por lo básico, como las piezas y sus movimientos. Cuando el pequeño (su hijo, por ejemplo) domine esta parte, comience a jugar versiones modificadas del juego. Que aprenda a su propio ritmo, siempre alentador y paciente. Finalmente, el joven desarrollará un interés por el juego y empezará a considerarlo una actividad muy divertida.

Pasos

Método 1 de 4: Presentar el tablero y las piezas al niño

1. 

   
   

   

   
   
   
   

   

   Vitaly Neimer
   Maestro de ajedrez internacional

   Consejo de experto: Mantenga a su hijo involucrado en el aprendizaje usando una historia o un cuento de hadas. Podrías, por ejemplo, explicar que el peón puede moverse dos veces saltando sobre un trampolín. ¡Usa tu creatividad!

2. 

   Anime a su hijo. Felicítelo cuando haga un movimiento, ya sea pequeño o grande. Verificar al rey y armar el tablero, por ejemplo, ya son grandes logros. Además, anime a su hijo incluso si no le va bien.
   • Di algo como "Está bien no ganar. Hiciste grandes jugadas con los caballos durante el partido".

3. 

   
   
   Deje que su hijo cometa errores. Enséñele las reglas mientras juega y corríjalo cuando falla. Además, anímalo de otras formas: erra a propósito y dale la oportunidad de ganar algunos partidos.
   • Cuando comprenda los movimientos básicos, el joven comenzará a aprender de la experiencia y las posibilidades.
   • Explique que el aprendizaje dura toda la vida y que el niño siempre puede volverse más hábil.

Consejos

• No le dé a su hijo un tirón de orejas, o lo desanimará.
• El ajedrez es un juego complicado. Empiece y proceda con calma. Si es necesario, consulte libros y manuales y anime a su hijo a hacer lo mismo.
• Si es posible, enseñe a dos niños al mismo tiempo. Así, mejorarán juntos y podrán jugar unos contra otros.
• Enséñele a su hijo a jugar los fines de semana o cuando esté libre y sin tarea.